Por Elvio Orellana
La caja automática de siete marchas dejó de ser exclusiva de las versiones tope de gama. Desde ahora, se ofrece en la variante intermedia Alaskan Intens, tanto 4×2 como 4×4.
El uso de las pickups ha cambiado sustancialmente. La mayoría de quienes las compran las utilizan para fines recreativos (en el mejor de los casos) o sencillamente como vehículo para la diaria. Esta tendencia ha generado una mayor demanda de cajas automáticas, un fenómeno que no solo se produce en el segmento de las pickups, sino prácticamente en todos.
Antes de que la Alaskan cumpla tres años desde que se encuentra a la venta en el mercado, Renault decidió democratizar el uso de las transmisiones automáticas. Para ello, decidió ofrecer la caja automática no solo en las variantes tope de gama (Iconic y Outsider), sino también en un nivel de equipamiento intermedio.
Hablamos de la Alaskan Intens, la cual estará equipada, tanto en la variante de tracción simple (2WD) como la 4×4 (4WD), con la conocida caja automática de siete velocidades.
Mejor dotada
Paralelo a esta implementación, Renault aprovechó para equipar mejor a su pickup en todas sus versiones. Por ello, a partir de ahora todas las Alakan van a disponer de seis airbags (frontales, laterales y de cortina) y paragolpes trasero con escalón, en tanto que dentro habrá nuevo tapizados en tela para todas las versiones, salvo para las que cuentan con cuero (Iconic & Outsider).
Apostando al turbo diésel de 190 CV
La parte mecánica no se modificó. Es decir, las dos nuevas versiones están impulsadas por el ya conocido 2.3 dCi de 190 CV de 450 Nm de torque. Es para remarcar que la variante 4×4 Intens mantiene la reductora, es decir, la marcha de fuerza cuya presencia es fundamental para un off-road exigente.
Un test de larga duración
La presentación de las nuevas variantes automáticas se realizó a través de una extensa travesía de 1.200 kilómetros que partió desde Buenos Aires y que tuvo como puntos referenciales Sierra de la Ventana y la ciudad de Tandil. El foco del recorrido estuvo puesto en la experiencia off-road, donde las variantes 4WD pudieron reafirmar su condición de vehículo 4×4 por terrenos de gran dificultad.