Por Adrián Baer.
El pasado 21 de diciembre se promulgó en el Boletín Oficial el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) impulsado por el presidente Javier Milei. Entre las modificaciones que incluye, se destaca la implementación de cambios en los registros del automotor.
Establecido inicialmente por el decreto-ley 6582 en 1958 y posteriormente ratificado en 1997 mediante la Ley 14.467 y sus modificatorias, el Régimen de Registro Automotor tendrá nuevas modificaciones que apuntan a su desregulación.
Los objetivos principales que motivan la iniciativa son los siguientes:
- Digitalizar en todo lo posible los trámites relacionados con información de acceso público.
- Desregular la operatoria creando un registro digital de órbita nacional que evite la obligatoriedad de realizar los trámites en los registros seccionales.
- Agilizar el sistema reduciendo pasos, requisitos y costos.
Además, se eliminarán algunos requisitos para transferencias, como el libre de deuda de multas. Tampoco será necesario solicitar informe de dominio.
Hasta el momento no se han realizado modificaciones sobre los costos tanto del patentamiento y la transferencia (que en algunos casos pueden superar el 7% del valor del bien adquirido), como tampoco del pago de patentes. En este sentido, hay algunos proyectos de ley que proponen un arancel único y accesible para estos trámites y obligaciones.
En el texto publicado en el Boletín Oficial sobre los cambios en los registros del automotor, se agrega una cláusula transitoria. La misma sostiene que la Dirección Nacional deberá hacer efectiva la puesta en marcha de su registro remoto, abierto, estandarizado y accesible a más tardar el 2 de mayo de 2024.
Lo que se sigue manteniendo sin cambios para los automovilistas es la obligatoriedad de la realización de la VTV y de la contratación del seguro del vehículo. En tanto, la desregulación, la digitalización y la reducción de requisitos prometen agilizar significativamente el proceso para los usuarios.