Hombre conduciendo el SUV Bronco Sport en camino de tierra.

Los clásicos, aquellos modelos que traspasan las fronteras de las modas y tendencias, se caracterizan por perdurar en el tiempo y son capaces de generar las mismas emociones a lo largo de diferentes generaciones. Ford es una de las terminales generalistas que más se empeña en revivir coches que marcaron un hito a lo largo de su vida. Así fue que revivió a su emblemático Muscle Car, el Mustang y lo adaptó a los tiempos actuales.

Hace unos meses, la marca del óvalo decidió desempolvar al Bronco, uno de sus míticos 4×4 que fue furor entre la década del 60 y 90 y lo reversionó, para que los nostálgicos vuelvan a suspirar y para que aquellos que no lo conocieron, puedan experimentar lo que es conducir un verdadero 4×4.

En Carmuv pusimos a prueba a la versión Wildtrak, la más apta para el off-road, y te contamos en este informe todas las sensaciones que vivimos a bordo de este todo terreno.

Bronco Sport, un SUV contra la corriente

La carrocería bitono del Bronco Sport.
El SUV mantiene viva la esencia “retro” de su antecesor.

A diferencia de la mayoría de sus rivales (Hyundai Tucson, Chevrolet Equinox, Nissan Murano, Renault Koleos, Jeep Compass), el Bronco Sport escapa de los diseños modernos, frentes afilados, ópticas rasgadas, líneas de carrocería marcadas y de remates en descenso. Por el contrario, apela a una carrocería cuadrada, un capot plano con dos nervios bien marcados, faros delanteros redondos y un portón trasero vertical.

Es decir, mantiene viva la esencia del modelo original, pero suma soluciones actuales como sus faros de tecnología full led, luces diurnas, barras longitudinales en el techo,  ganchos de rescate delanteros, y esta variante denominada Wildtrak (se ofrece también una versión con menos detalles llamada Big Bend) suma una carrocería bitono y un techo solar corredizo.

Habitabilidad que reconforta

Interior del SUV con butacas amplias
Interior sumamente confortable.

La propuesta de su cabina es muy agradable. Hay lugar para 5 ocupantes, los cuales van a disponer de una gran distancia con respecto al techo debido al diseño rectangular de la carrocería. La calidad de materiales y terminaciones son de lo mejor. Los tapizados de esta versión son de cuero en un tono marrón.

En el puesto de conducción uno se encuentra con un tablero de instrumentos que combina el modo analógico (relojes con agujas) con tecnología digital (display grande a color). En la consola central toma protagonismo una pantalla táctil de 8” con el ya conocido Sync3, más Apple CarPlay y Android Auto, que en esta versión cuenta con GPS está integrado.

Es también válido marcar la presencia del climatizador bizona y el equipo de audio, el cual cuenta con una dotación de 10 parlantes, lo que se traduce en una fidelidad y un sonido Premium.

240 caballos desbocados 

Bronco Sport con el capot levantado

El responsable de impulsar a nuestra unidad de prueba es el 2.0 litros de 4 cilindros de unos 240 CV y 373 Nm. La versión Big Bend cuenta por su parte, con un turbo naftero 1.5 EcoBoost, de 3 cilindros con 175 CV y un torque máximo de 258 Nm.

Ambas motorizaciones se asocian a una caja automática de 8 marchas, la cual se dirige a través de una “ruedita” (Rotary Shifter) En el caso del Bronco tope de gama (Wildtrak) colaboran unas levas detrás el volante, recurso que la variante más concebida para el asfalto, no ofrece.

Otro mecanismo que comparten, además de la tracción 4×4, son los modos de conducción llamado GOAT. Los mismos están diseñados para adaptarse a diferentes terrenos y con los cuales va mutando la entrega de potencia del motor, la dureza de la dirección y el tipo de tracción.

Experiencia a bordo

El Bronco Sport Wildtrak es la versión que recibió un tratamiento especial para el trato duro. Neumáticos para uso off-road (Pirelli Scorpion ATR 225/65R17), un importante despeje del suelo (223 mm) y buenos ángulos de ataque (30°), salida ( 33°), ventral (20°) y una respetable capacidad de vadeo (600 mm).

Pese a ser un vehículo pensado para la aventura, lo primero que llama la atención es la suavidad en el uso diario. Gran responsable de ello es el sistema de amortiguación (independiente en las 4 ruedas con eje trasero multibrazo), un conjunto que hace que el Bronco se sienta muy cómodo en cualquier superficie.En ruta, los 240 CV empujan en serio y en apenas 6.9 segundos el velocímetro ya trepa a los 100 km/h.

Bronco Sport Off Road

La solidez que transmite, tanto en el asfalto como en los caminos de tierra, es uno de sus grandes atributos. Pero lo suyo son los tramos agrestes y dificultosos. Es decir, todos aquellos terrenos en los que muchos SUVs pueden llegar a titubear, el Bronco los atraviesas sin despeinarse.

Su talón de Aquiles se centra en su elevado consumo. Entre 15 y 16 litros cada 100 km en ciudad, mientras que en ruta  se reduce a 10 litros para recorrer la misma distancia. Su potencial cliente es aquel que busca un SUV que además de poder utilizar un vehículo en la diaria, ofrezca posibilidades concretas de salir del pavimento y no fallar en el intento. Todo ello, lo brinda el Bronco Sport, sin dejar de mencionar de su concepción “retro”, algo que lo hace único en su segmento.

Bronco Sport en imágenes

Ficha técnica

  • Modelo: Ford Bronco
  • Origen: México
  • Motor: turbonaftero de 3 cilindros, 1.5 litros con 175 CV y 258 Nm. Turbonaftero de 4 cilindros, 2.0 litros con 240 CV y 373 Nm
  • Caja: automática de 8 marchas
  • Tracción: 4WD
  • Medidas: largo 4.386 mm, ancho 2.099 mm, alto 1.785 mm y 1.813 mm
  • Distancia entre ejes: 2.670 mm
  • Capacidad de baúl: 638 litros
  • Precio: Sport Big Bend 1.5: U$S 44.200/ Sport Wildtrak 2.0: U$S 54.000
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